Alertan de la presencia en Francia de una nueva mosca blanca de gran voracidad
La Unió Llauradora ha informado de la presencia en el sur de Francia de una nueva especie de mosca blanca no presente en nuestra agricultura, Alerucanthus spiniferus (Quaintance) que afecta a 102 especies vegetales, entre ellas los cítricos, y que actúa con gran voracidad.
Esta plaga de cuarentena detectada en junio en el país vecino, con origen en el sudeste asiático, se ha localizado por el momento en 14 municipios –y otros 5 más en espera de confirmación– de la región francesa de Occitania.
La Unió ha pedido tanto a la conselleria de Agricultura de la Generalitat Valenciana como al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) que actúen «para evitar que la plaga entre en nuestro territorio y en caso de que no lo hagan y se introduzca en nuestros cultivos pedirá una responsabilidad patrimonial porque supondría nuevamente un sobrecoste para los productores que no pueden asumir y sobre la cual no tienen responsabilidad».
Carles Peris, secretario general de esta organización agraria, ha indicado al respecto que «se pone en evidencia que los controles fitosanitarios en frontera son ineficientes como venimos denunciando desde hace tiempo y no tenemos herramientas suficientemente eficientes –ni fitosanitarias ni de lucha biológica– para hacer frente a la amenaza de una nueva plaga».
Inspecciones en origen
Asimismo, ha insistido en la necesidad de implantar las inspecciones en origen «para que cuando alguien quiera exportar a la UE se establezcan automáticamente controles rigurosos y eficaces y que cumplan la misma normativa que se les exige a los productores valencianos».
La Unió Llauradora ha recordado que en la actualidad «el campo valenciano ya sufre un aumento considerable de los costes de producción debido al control y lucha contra plagas, entre ellas otras moscas blancas, por el incremento del número de aplicaciones de productos fitosanitarios». Además, en España, no hay productos fitosanitarios específicos para su control, «por lo cual se deberían usar materias activas autorizadas por el Registro Oficial de Productos Fitosanitarios para el control de moscas blancas y tenemos cada vez menos para usar». En caso de detección se tiene que aplicar el programa de erradicación aprobado por el MAPA.
La nueva plaga de cuarentena de la mosca blanca espinosa afecta a todas las variedades de cítricos, pero también a viña, caqui y peral, además de ornamentales como el rosal.
Produce elevadas cantidades de melaza que cubren a hojas y frutos, y como sucede en el resto de los ataques de otras moscas blancas, «el hongo de la negrilla se puede instalar sobre la melaza, reduciendo la respiración y la fotosíntesis de la planta». Provoca, al mismo tiempo, defoliaciones que debilitan el árbol y afectan gravemente la producción con daño en los frutos «puesto que los ataques de esta mosca pueden reducir el cuajado».