Cooperativas

Artículo de opinión de Cirilo Arnandis, presidente del Grupo de Trabajo de Cítricos de Cooperativas Agro–alimentarias de España.

 

Cooperativas Agro–alimentarias de España ha solicitado su baja de la interprofesional citrícola, Intercitrus. Como presidente de la sectorial citrícola de esta organización me gustaría explicar nuestra decisión, consensuada y muy meditada. Cooperativas decide dar ese paso –tan frustrante, como inevitable– no como un punto final, sino como el principio de otra etapa, otro proyecto, quizá.

No hace falta que recordemos en detalle el recorrido de Intercitrus, que ya tiene más de 25 años. La historia simplemente se podría resumir en tres actos.

Primero, una fase de más de una década, en la que la organización fue pionera y logró aglutinar los intereses del sector citrícola español generando un foro de diálogo e intercambio y –sobre todo– construyendo un proyecto de promoción del consumo, precursor, materializado a iniciativa de productores, cooperativas, comercio e industria, que recibió el respaldo de las administraciones y el reconocimiento del sector citrícola español.

Sin ser pretencioso ni resultar excesivamente nostálgico, creo que no es exagerado afirmar que Intercitrus fue entonces un modelo a seguir para otras interprofesionales españolas y quien abrió camino para que el sector agroalimentario español emprendiera acciones colectivas de promoción sectorial al amparo de la política que las apoyaba desde Bruselas. Actualmente hay 26 interprofesionales reconocidas en España, muchas de ellas con exitosas campañas de promoción plurianuales en marcha, beneficiarias de ese apoyo financiero comunitario.

Segundo acto: en un momento dado, los miembros de la organización fuimos incapaces de poner nuestros objetivos comunes por delante de algunos particulares y, de la noche a la mañana, se apagó la luz, en 2012. Se paralizó la promoción, se perdieron los fondos públicos, se entró en una fase de latencia y la interprofesional desapareció del mapa.

Tras 8 años de oscuridad (que cada uno habrá sobrellevado como habrá podido –en mi caso con una profunda rabia e impotencia–), en 2020, decidimos encender, otra vez juntos, una candela. Cooperamos todos generosamente y fuimos capaces de actualizar administrativamente la organización, de dotarle de medios físicos y personales y de reanudar cierta actividad de interlocución (interna, además de con las administraciones autonómicas, estatales, comunitarias y con otras organizaciones europeas) que resultó de gran utilidad, particularmente en el terreno de la política fitosanitaria. En efecto, la interprofesional contribuyó al empujón final necesario para que España recibiera de Bruselas ¡por fin! un refuerzo de la protección fitosanitaria en la frontera de la UE que llevábamos años reclamando. Fueron años de muy buena predisposición por todas las organizaciones miembro y no puedo sino reconocer la generosidad de las tres personas que han ocupado sucesivamente la presidencia, así como la implicación de la directora de la organización, durante este periodo que sería el ‘tercer acto’.
 

Consensuar un modelo de contrato de compraventa

En verano de 2022, Cooperativas Agro–alimentarias de España accedió a la presidencia y propuso dos grandes objetivos para su mandato anual, a través de los cuales consolidar el relanzamiento de la interprofesional: uno, consensuar un modelo de contrato de compraventa de mandarinas y naranjas y, dos, relanzar un proyecto de promoción del consumo de ambos productos. Esos mismos objetivos guiaron también nuestra actividad como vicepresidentes en la campaña 2023/24.

El primero objetivo, podría haber sido inmediato, si se hubiera optado por –simplemente y modestamente– plasmar en un contrato tipo estrictamente las estipulaciones referidas en la nueva ‘Ley de la Cadena’, es decir, las mismas condiciones que se están –en la práctica– ya aplicando por los operadores en el campo de la citricultura española, nos gusten estas más o menos. Desde cooperativas, no hemos sabido entender, sinceramente, las motivaciones para negar esa posibilidad ‘de mínimos’. Nuestra organización es la menos concernida por esta cuestión, a pesar de lo cual hemos intentado mediar entre las dos posiciones desavenidas. Ha sido sin éxito ¡Lo lamento!

El segundo objetivo debería haber sido irrefutable. Irrefutable, a la vista de los varios factores que confluyen actualmente y que nos obligan a remangarnos –todos– ineludible y urgentemente para mejorar la posición de nuestras naranjas y mandarinas en los mercados, aprovechando los apoyos a la promoción a nuestro alcance: la cofinanciación por la UE (de hasta el 80%) y la herramienta recaudatoria de la extensión de norma. Citaré cinco de esas razones ineludibles: 1. La grave tendencia a la baja del consumo de cítricos; 2. La creciente presión de las importaciones hacia la UE de producto de terceros países y la necesidad de poner en valor el ‘made in EU’ para diferenciarse en el mercado comunitario y atraer y fidelizar al consumidor europeo; 3. Los vientos –insuflados desde la opinión pública y de las administraciones– que corren a favor de una dieta más saludable, más vegetal; 4. La necesidad de recuperar para nosotros los atributos positivos que son propios y característicos de las frutas y hortalizas frescas pero de los que se está apropiando la industria de ultraprocesados... 5. La demostración, por la experiencia, de que cuando los distintos actores del sector han colaborado para hacer promoción, el trabajo en común fue muy eficaz.

A pesar de todos esos argumentos de peso, tampoco hemos sido capaces de reunir los suficientes apoyos para este tipo de iniciativa. ¡Lo lamento mucho más!
 

Bucle incomprensible y absurdo

Después de estos dos últimos años, no podemos ocultar (y no hemos podido evitar) que la interprofesional se encuentra en un bucle: no homologamos un contrato que sin embargo utilizamos generalizadamente, y condicionamos el relanzamiento de la actividad promocional a la existencia de esa homologación, imposibilitando así emprender la iniciativa que todo el sector –todo– considera que es prioritario... Es un bucle incomprensible y absurdo, en el que Cooperativas Agro–alimentarias de España se encuentra atrapada con enorme impotencia y frustración. Volvimos a dejar pasar el tren de la convocatoria de ayudas comunitarias a la promoción (convocatoria 2024) y percibimos que este barco no llegará a ningún puerto.

Ese bucle es ya insostenible y, llegados a este punto, nuestros órganos de gobierno han decidido salir de él. Reorientar nuestros esfuerzos. No estamos siendo útiles quedándonos en esa posición. Por eso, pedimos disculpas si quedaba alguna baza que no hemos sido capaces de jugar y decidimos dar un paso atrás. Un paso hacia fuera. Hasta aquí hemos llegado las cooperativas como miembros de Intercitrus.

Tengo la firme convicción de que esta decisión de nuestros socios no es destructiva, es constructiva. Ponemos un punto y aparte y,  desde ya, estamos a disposición y apoyaremos incondicionalmente cualquier iniciativa que el sector citrícola español pueda imaginar para el futuro, que tenga por objetivo prioritario la promoción que tanto necesitamos, así como tantos otros proyectos en los que podríamos colaborar (el seguimiento de los mercados intra y extra comunitarios, la innovación, la apertura de mercados en terceros países, la adaptación del sector a la creciente regulación medioambiental y de sostenibilidad, seguir reivindicando una política comunitaria de protección fitosanitaria en frontera eficaz serían algunos de ellos).

Respecto a ese futuro proyecto -nuevo o renovado- que espero que algún día prospere para bien de nuestros productores de naranja y mandarina, sugeriría, que apliquemos las lecciones aprendidas en estos años y, a modo de despedida, me atrevería a destacar 5 de esas lecciones:

A pesar de las diferencias entre eslabones de la cadena y organizaciones, existen motivos e instrumentos para colaborar y trabajar en objetivos comunes en el sector de las naranjas y las mandarinas español (y europeo) y grandes posibilidades de éxito, si sobreponemos el interés general del sector, por encima de objetivos cortoplacistas o personalistas.

La fórmula de la interprofesional, que está funcionando en tantas otras producciones puede servir también a nuestro sector, aunque corrigiendo ciertas limitaciones que en su día nos autoimpusimos. Dos ejemplos: adoptar las decisiones por unanimidad, debe ser un objetivo, pero no una obligación; la presidencia plurianual (y no rotatoria cada año) es necesaria para dar cierta estabilidad al proyecto y comprometer más a sus miembros.

La ubicación de la sede no puede condicionar ni servir de excusa para que nadie quede fuera del proyecto: en el contexto actual, donde el teletrabajo, las conexiones online y otras herramientas colaborativas han facilitado enormemente la conexión a distancia, la sede social puede estar en cualquier región productora, o en Madrid, o en Finisterre, o ser itinerante o virtual... y esa ubicación no debería condicionar en nada la actividad de la organización.

Necesitamos a todos los eslabones de la cadena y a todos los representantes; nadie que quiera contribuir debería quedar fuera; tenemos demasiadas tareas pendientes de interés general, como para prescindir de ningún músculo.

Siendo conscientes de la amplitud del margen de maniobra de una interprofesional y teniendo en cuenta los intereses de las partes, deberíamos centrarnos en sacar adelante el objetivo de la promoción (objetivo urgente, necesario e incontestable) y, además, ampliar el radio de acción hacia los otros objetivos compartidos.

Leer más

El Consejo Sectorial de Frutas y Hortalizas de Cooperativas Agro–alimentarias de España ha celebrado su asamblea general, en el transcurso de la cual el representante de Andalucía y presidente de Cooperativas Agro–alimentarias de Almería y de la cooperativa Vicasol, Juan Antonio González Real, ha sido reelegido presidente. Asimismo, durante la reunión, en la que participaron más de 50 representantes de cooperativas de Andalucía, Comunidad Valencia, Extremadura, Cataluña, Aragón, Navarra, Galicia y Castilla–La Mancha, se analizaron los retos y oportunidades en los que trabajará la organización durante los próximos cuatro años.

El reelegido presidente, en su intervención, ha destacado la fortaleza y resiliencia de las cooperativas hortofrutícolas en los últimos años, «las cuales han crecido por encima de la media del sector y han consolidado su estrategia de concentración de la oferta, mejorando la posición de sus socios y socias en el mercado».

La reacción de las cooperativas ante las circunstancias excepcionales y los accidentes climáticos; su adaptación a los retos medioambientales; el acceso al uso de soluciones fitosanitarias o el empleo de envases para la comercialización de sus productos; la protección fitosanitaria en frontera; la política comercial de la Unión Europea y el impacto del incremento de las importaciones desde terceros país en el mercado comunitario; la reclamación de la aplicación del principio de ‘reciprocidad’; el acceso de las cooperativas a la innovación y la digitalización o la estrategia para revertir la tendencia decreciente del consumo de frutas y hortalizas fueron algunos de los asuntos analizados en el seno del Consejo.

Durante la reunión se nombraron, además del presidente de la sectorial, los cargos de presidente de los distintos subsectores que forman parte del Consejo Sectorial:

– Presidente Subsector Cítricos: Cirilo Arnandis (Comunitat Valenciana)
– Presidente Subsector Fruta Pepita: María Casoliva (Catalunya)
– Presidente Subsector Fruta Hueso: Javier Basols (Aragón)
– Presidente Subsector Hortalizas: Juan Antonio González (Andalucía)
– Presidente Subsector Fruta Tropical: Álvaro Nogués (Comunitat Valenciana)
– Presidente Subsector Tomate Transformado: Juan Francisco Blanco (Extremadura)

Tras la asamblea, los participantes realizaron una visita técnica, a un invernadero solar y a la cooperativa Vicasol, primera OPFH española en volumen de inversión a través de su programa operativo. Además, visitaron las nuevas instalaciones del Centro de Innovación Tecnológica (CIT) de COEXPHAL–Cooperativas Agro–alimentarias de Almería.

Leer más

Los consejos rectores de los grupos cooperativos leridanos Actel y Fruits de Ponent han decidido iniciar el camino para crear una sociedad compartida entre ambos. En este sentido, ya han validado el trabajo preparatorio que iniciaron hace unos meses.

Esta iniciativa tiene como finalidad establecer la gestión conjunta de las unidades de negocio de fruta, aceite, almendra, gestión energética y todos los servicios destinados a sus asociados.

La decisión de esta colaboración ha surgido después de un período de reflexión conjunta de las dos cooperativas, «teniendo en cuenta el contexto externo marcado por la alta concentración de actores en la cadena de valor agroalimentaria y los cambios significativos en la producción agraria causados por la emergencia climática, especialmente acentuada en las últimas campañas». Estos factores, junto con el objetivo de promover el desarrollo sostenible de la actividad empresarial, plantean el reto de ofrecer a sus socios y socias una mayor rentabilidad en sus explotaciones, «mediante una transformación y comercialización más eficientes de los productos agrarios, así como explorar de forma conjunta un mayor dimensionado para hacer frente a las altas necesidades de inversión actuales».

Además, esta alianza estratégica «quiere proporcionar un servicio integral a toda la masa social y buscar nuevas oportunidades de negocio, sobre todo en ámbitos como la energía, el soporte de trabajo a campo con personal para los socios productores y la captación de talento en la futura organización». De consolidarse esta alianza estratégica, la nueva sociedad conjunta gestionaría más de 100.000 toneladas de fruta, alcanzando una facturación anual que superaría los 160 millones de euros, sumando las diversas áreas de negocio compartidas.

Ambos grupos cooperativos han establecido ya un programa de trabajo con el objetivo de que la nueva entidad pueda iniciar su actividad durante el primer semestre de este 2024.

https://actelgrup.com

www.fruitsponent.com

Leer más

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

El evento, organizado por Cooperativas Agroalimentarias de España en colaboración con URCACYL, el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y el Banco Santander, ha reunido en la Bodega Cuatro Rayas, ubicada en La Seca (Valladolid), a jóvenes de toda España «para poner en común y debatir sobre las acciones y medidas de apoyo a la incorporación de las nuevas generaciones a la agricultura y la ganadería, la sostenibilidad ambiental y social en el medio rural o el papel del cooperativismo como motor del sector agroalimentario»

En el desarrollo del encuentro, además de compartir experiencias sobre su labor profesional, los asistentes han podido conocer de primera mano las fórmulas empleadas por Bodega Cuatro Rayas para garantizar la sostenibilidad y el relevo generacional en el entorno vitivinícola, además de degustar algunas de las elaboraciones de esta empresa que destaca en la producción de vinos blancos de calidad bajo el amparo de la D.O. Rueda. 

Los congresistas han descubierto la experiencia de la bodega cooperativa fomentando el relevo generacional a través del trabajo de la ‘Comisión Cuatro Rayas Envero’.

Durante el acto de inauguración del encuentro, el secretario general de Agricultura y Alimentación del MAPA, Fernando Miranda, ha subrayado el compromiso del Gobierno de España por impulsar la incorporación de jóvenes agricultores y agricultoras a la actividad agrícola y ganadera, porque son la punta de lanza del futuro del sector agroalimentario. Asimismo, ha destacado el importante papel a jugar en este ámbito por las cooperativas, que pueden ser «la mejor ayuda para guiar a los jóvenes que se incorporan a la actividad agraria en su futuro profesional».

El secretario general ha recalcado la importancia y la diversidad del movimiento cooperativo en España, con más de 3.000 entidades, y su papel esencial en la dinamización del mundo rural. Por ello, el MAPA convocó, el pasado abril, ayudas por un importe de 50 millones de euros para mejorar de la competitividad de las Entidades Asociativas Prioritarias (EAP) mediante la financiación de inversiones para la transformación, comercialización y desarrollo de los productos ofrecidos por estas entidades tan ligadas al medio rural.

Miranda ha subrayado que los jóvenes van a contar, con la nueva Política Agraria Común (PAC), con importantes instrumentos para establecer su actividad empresarial en el sector agrario. En este sentido, el ministerio estima que en el periodo 2023–2027 se podrán incorporar a la actividad agraria unos 16.000 jóvenes. Con la nueva PAC, en la que el relevo generacional jugará un papel esencial, cerca de 230 millones de euros al año se destinarán a pagos suplementarios a jóvenes agricultores y ganaderos, de los que 135 millones de euros se corresponden a facilitar nuevas incorporaciones.

También ha lanzado un mensaje a las jóvenes agricultoras y ganaderas, para que emprendan en el medio rural, ya que España ha sido el primer país en introducir una prima adicional del 15% para el pago complementario a jóvenes cuando se trate de una mujer.

El secretario general de Agricultura y Alimentación ha animado a que las nuevas generaciones de agricultores y ganaderos se mantengan en la actividad agraria, esencial y estratégica, para el conjunto de la sociedad.

Leer más

Las cooperativas de España, Francia, Italia y Portugal, que representan el 50% de la producción de vino de la Unión Europea (UE), han solicitado a la Comisión Europea un presupuesto extraordinario para el sector vitivinícola.

En una carta dirigida al comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, Janusz Wojciechowski, las cuatro organizaciones representativas de las bodegas cooperativas europeas, Coopération Agricole, Alleanza delle Cooperative Italiane, CONFAGRI y Cooperativas Agro–alimentarias de España, han expuesto la grave situación que atraviesa el sector desde hace un año a causa del confinamiento y las restricciones por la Covid–19, que han ocasionado un descenso en el consumo de vino a nivel mundial y la consiguiente caída de las exportaciones, tanto en volumen como en precio.

Los stocks de vino en la UE son elevados y en 5–6 meses comenzará la nueva cosecha, por lo que estas organizaciones consideran que es necesario «habilitar un presupuesto extraordinario equivalente al presupuesto anual del programa de apoyo al sector del vino, para que cada Estado Miembro ponga en marcha medidas urgentes que se adecúen a sus necesidades reales y permitan mejorar la situación del mercado, trabajar en medidas de promoción y de estímulo de la demanda para lograr la competitividad del sector».

Asimismo, las bodegas cooperativas han resaltado el hecho que la Comisión haya flexibilizado las medidas de aplicación del programa de apoyo en el sector del vino, medidas que son beneficiosas para el sector, «pero del todo insuficientes en este momento». Además, han recordado al Comisario que en 2021 el presupuesto para la gestión del programa de apoyo se ha reducido un 3,9% en los distintos Estados Miembros.

Por su parte, Cooperativas Agro–alimentarias de España ha indicado que apoya y valora que el ministro de Agricultura, Luis Planas, haya incluido en la reunión del Consejo de Ministros UE de Agricultura del 22 de marzo, la posibilidad de habilitar fondos extraordinarios para el sector del vino, y esperan que el resto de países productores adopten medidas ya que es poco probable que el consumo de vino se recupere a corto plazo, debido a su fuerte vinculación al sector Horeca, al turismo, y a eventos y fiestas. 

Leer más

Cooperativas Agro-alimentarias de España ha celebrado el 11 de noviembre un #SeminariosCoop online con el título ‘Perspectivas de mercado en el vino’, en el que los más de 80 asistentes han podido conocer la situación actual del mercado nacional e internacional, así como los principales retos a los que se enfrenta el sector vitivinícola.

El encuentro ha sido inaugurado por el presidente de Cooperativas Agro-alimentarias de España y presidente de la sectorial de Vino, Ángel Villafranca, y la directora de Negocio Agro-Santander España del Banco Santander, Lorena Ruiz.

En la primera ponencia, Pedro Ballesteros, Master of Wine, ha valorado el papel social de las cooperativas y ha destacado que poseen el mayor patrimonio vinícola del mundo, ya que nadie tiene tantas viñas viejas, un concepto que ha calificado de mágico para llegar al consumidor. Durante su intervención ha analizado la estrategia vitivinícola que llevan a cabo en otras regiones productoras bodegas cooperativas, centrándose especialmente en Italia. Al respecto, ha destacado que las cooperativas con un movimiento de integración más fuerte y eficiente han lanzado vinos como el Prosecco o el Lambrusco con los que el viticultor ha obtenido mejores rentas beneficiando a todo el territorio.

Pedro Ballesteros ‘Las cooperativas españolas tienen el mayor patrimonio vinícola, pero les falta crear valor’

El reto de las cooperativas es crear valor de forma sostenible y, en este sentido, Ballesteros ha remarcado que la comercialización y la comunicación son asignaturas pendientes en algunas cooperativas en España. Por último, el Master of Wine ha animado a las bodegas cooperativas a tener visión a largo plazo, a clasificar y zonificar según las uvas y a divulgar más su compromiso con el desarrollo sostenible del territorio y el patrimonio cultural.

A continuación, Emma Castro, directora del departamento vitivinícola de Cooperativas Agro-alimentarias de España, ha expuesto datos sobre los principales imputs del sector, producción, exportaciones y ventas, tanto a nivel nacional como internacional. Según la previsión de la Comisión Europea, la producción en la Unión Europea (UE) se ha incrementado un 4% respecto a 2019, estimándose en 163 millones de hectolitros (Mhl) de vino y mosto, mientras que la producción mundial de vino se estima alrededor de 258 Mhl. Por lo que se refiere a las exportaciones españolas, los productos que han tenido mejor comportamiento en los mercados internacionales el primer semestre han sido el mosto y el vino en Bag-in-Box.

 

Retos y oportunidades en los mercados exteriores
Durante su intervención, Jaime Uscola, jefe de Negocios Internacionales del Banco Santander, ha detallado los retos y oportunidades para las bodegas españolas en los mercados exteriores, con especial atención a Reino Unido y Estados Unidos. Uscola ha destacado que en el sector del vino el 99% de sus clientes están fuera, y que los retos a los que se enfrentan en este momento las bodegas son el Brexit, el cambio en la presidencia en los EE. UU. y la evolución del mercado chino. Durante su exposición ha presentado la herramienta SantanderTrade con la que cuenta su entidad para acceder a clientes en mercados internacionales.

A finalizado la jornada con una mesa redonda moderada por el presidente sectorial Ángel Villafranca en la que han participado Abel Torres, de Viñedos de Aldeanueva (La Rioja); José Ramón Pascual, de Anecoop Bodegas (Comunitat Valenciana); Christophe Marquet, de Covides Vinyes-Cellers (Catalunya) y Jesús Julián Casanova, del Grupo Vidasol (Castilla-La Mancha).

Durante la charla se ha expuesto como ha afectado la pandemia de la Covid–19 al sector, en especial al cava por la falta de eventos sociales y la posibilidad de reuniones, y cómo se ha incrementado, en general, la venta online sobre todo en el norte de Europa, EE. UU. y Japón, mientras que en España todavía no ha explotado pero que en breve llegará su despegue vía alguna plataforma. Respecto al Brexit, han mostrado sus dudas por el comportamiento de la divisa, las trabas burocráticas, la documentación y la personalización del etiquetado, y se han mostrado esperanzadores con que no afecte a la fiscalidad.

En relación al marketing, todos han abogado por crear nuevos productos, como cócteles, y formatos, manejables, fáciles de abrir, la demanda de vino 3/8 ha crecido durante la pandemia y no descartan que haya que apostar por el vino en lata que de hecho ya está funcionando en países como EE. UU., que ha de permitir acercar a un consumidor joven y que se ofreciera en las máquinas de vending, en países como Japón donde están muy implantadas.

Los representantes de las bodegas cooperativas han señalado que hay que seguir trabajando, y apostar por nuevas técnicas e ideas en la producción de vinos que luego sean más fáciles de comercializar, sin perder la calidad y el servicio que hacen que los vinos cooperativos están presentes en todo el mundo.

Agustín Herrero, director de Cooperativas Agro-alimentarias de España, ha clausurado el seminario virtual, que ha contado con el patrocinio de SantanderAgro, destacando que en nuestro país «tenemos viñedos propios, territorio, contamos con tecnología, calidad del producto, talento y conocimiento, herramientas necesarias para crear valor sostenible y la apuesta de las cooperativas debe ser aunar esfuerzos y pensar a medio plazo para crecer».

Leer más

La Federación de Cooperativas Agrarias de Cataluña (FCAC) reclama medidas urgentes de apoyo e inversiones para los sectores del vino y cava con el objetivo de poder hacer frente a la caída de las ventas que se derivará del nuevo cierre de bares y restaurantes debido de la Covid–19. En este sentido, esta entidad ha recordado que más del 60% de los ingresos de la mayoría de las cooperativas vitivinícolas provienen del canal Horeca.

Joan Josep Raventós, responsable de vino y cava de la FCAC, ha manifestado que «la prolongación de las medidas para frenar los contagios por la pandemia está teniendo consecuencias devastadoras para las bodegas vitivinícolas, que tenemos el nicho de mercado en canales como la restauración. Para hacer frente a la parada de las ventas, el sector necesita medidas de la Administración y también quisiéramos pedir a la ciudadanía un compromiso con los productos locales, por ejemplo, eligiendo cestas de Navidad con vinos y cavas de las DD. OO. catalanas». Y ha reiterado que «mantener la actividad económica en el territorio es, en definitiva, propiciar el arraigo de la población rural y ayudar a la conservación del medio ambiente y de un paisaje acogedor del turismo de proximidad, como hemos visto este verano».

El parón de ventas por la pandemia Covid-19 se suma al descenso de un 30% de la cosecha de este año, debido a la plaga del mildiu (unos 310 millones de kg de uva frente a los 429 millones de kg de la campaña pasada).

Las demandas de las cooperativas tienen como objetivo ayudar a paliar los efectos de la crisis y evitar la adopción de medidas laborales y organizativas a que se ven abocadas, teniendo en cuenta que son generadoras de riqueza y puestos de trabajo en un entorno rural donde las alternativas son limitadas.

En Cataluña, hay unas 60 bodegas cooperativas que producen la mitad del vino que se hace en esta comunidad autónoma, unos 1,5 millones de hectolitros aproximadamente, y que están distribuidas por todo el territorio con presencia en casi todas las denominaciones de origen. 

Leer más

Cooperativas Agro-alimentarias de España ha celebrado su Asamblea General de forma telemática, en el transcurso de la cual Ángel Villafranca ha sido reelegido presidente por unanimidad. También han sido reelegidos, Juan Rafael Leal, vicepresidente primero; Cirilo Arnandis, vicepresidente segundo; Jerónima Bonafé, secretaria y José Montes, vicesecretario.

Villafranca ha destacado en su discurso que «las cooperativas no son el problema del sector, son la mejor solución para la defensa de la renta de los agricultores y ganaderos. Incluso las cooperativas más modestas aportan más valor añadido a sus socios que lo que pueden encontrar fuera de ellas, si no, no permanecerían».

El reelegido presidente ha señalado que el sector agrario, productor de alimentos, vive del mercado que retribuye los productos en función de la oferta y la demanda. Para alcanzar una mayor retribución, que es el objetivo de las cooperativas, se necesita más dimensión, avanzar en la cadena de valor, innovar, más internacionalización, etc. Por ese motivo, ha reiterado que «por mucho que nos organicemos las cooperativas, difícilmente vamos a poder alterar la ley de la oferta y la demanda y, en consecuencia, el precio, menos aún en mercados globalizados».

Respecto a la Ley de la Cadena Alimentaria, Villafranca ha afirmado que «compartimos su objetivo que es mejorar los precios que perciben agricultores y ganaderos por sus productos, y que para ello debe perseguir las prácticas comerciales desleales y mejorar las relaciones entre los operadores». El presidente ha destacado que a juicio de Cooperativas Agro-alimentarias de España la ley debe respetar la relación mutualista socio-cooperativa. En cuanto a los contratos alimentarios, «la ley debe tener en cuenta las circunstancias de los mercados, así como el resto de los elementos que configuran un precio, los costes de producción, pero también la evolución de los precios del mercado, la calidad, la cantidad, el origen, las modalidades de entrega, etc.». Por último, ha destacado que además de los precios en origen y al consumidor, es necesario conocer los precios en eslabones intermedios y esta debe ser una de las principales aportaciones del Observatorio de la cadena Alimentaria.

Con respecto al papel de las cooperativas ha señalado que podrían ordenar mejor las campañas de comercialización de los productos agroalimentarios. Villafranca ha destacado que «nos falta creer más en nuestras posibilidades, más confianza mutua e instrumentos que permitan organizarnos económicamente».

En la clausura de la Asamblea ha participado el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que ha reconocido la gran fuerza del movimiento cooperativo agroalimentario en España, con una facturación que representa más del 60% de la producción final agraria y casi el 30% del valor de las ventas netas de la industria alimentaria.

El ministro ha destacado que las cooperativas forman parte del futuro de la agroalimentación española y, que es necesario fomentar las 3 “d”, la dimensión, la diversificación y la digitalización, para conseguir cooperativas del siglo XXI.

Leer más

Según un comunicado de la Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (URCACYL), desde que comenzó el Estado de Alarma, las bodegas cooperativas de esta región han sufrido de forma importante un descenso en sus pedidos comerciales, que suponen el 30% de las ventas en algunas, y se acercan al 90% en la mayoría; dándose el caso de bodegas en las que lleva sin salir vino desde el pasado 16 de marzo.

Las más afectadas son las que trabajan con distribuidores que venden en el canal Horeca, debido al cierre de bares y restaurantes; mientras que en las operan con supermercados y grandes superficies se mantiene la actividad con algunos pedidos, aunque sean escasos. Además, la venta directa en sus instalaciones se ha reducido de forma casi total.

A las exiguas operaciones, se une que la mayor parte de los clientes, sobre todo los relacionados con el canal Horeca, están pidiendo aplazar los pagos del género retirado con anterioridad, o amenazando con no poder pagar, con lo cual las bodegas disminuirán sus ingresos de forma sustancial. «El impacto que esta situación va a tener en las bodegas cooperativas es difícil de calibrar y se empezará a notar en los próximos meses cuando se vea si todos estos pagos, que ahora se van retrasando, definitivamente se hacen o no» advierte URCACYL. Por ello, también se pide que las entidades de crédito sean sensibles con esta situación y faciliten periodos de carencia para los préstamos vigentes.

Esto supone que quizás también las cooperativas tengan que aplazar los pagos a sus proveedores externos, e incluso a sus propios socios de parte de la cosecha que está pendiente de abonar y que correspondía pagar en estos meses. Por ello, algunas cooperativas están buscando nuevos clientes en los pocos nichos de mercado que ahora están activos como pueden ser en alimentación o venta online.

En cuanto a los trabajadores y el trabajo en bodega, están solventando esta situación tan desconocida con responsabilidad e intentando mantener todos los puestos de trabajo. En los departamentos de administración están realizando teletrabajo en su mayor parte y en bodega suelen estar a turnos, con la mitad de la plantilla, o con cambio de horarios para realizar las tareas propias de la bodega, ya que el vino requiere el mimo y los cuidados de siempre. Pero como los pedidos escasean y la necesidad de embotellado también baja, algunas ya se plantean realizar solo tareas de mantenimiento general de las instalaciones y de los equipos e incluso algún ERTE.

Por ello desde URCACYL apelan a que los consumidores sigan tomando vino en sus casas, colaborando con un sector tan estratégico en esta región y que mantiene tantos puestos de trabajo, directos e indirectos. Y que ese vino sea de cooperativas porque son empresas socialmente responsables y sus beneficios van a parar directamente a los viticultores.

Leer más

El presidente de Cooperativas Agro–alimentarias de España y representante del sector del vino, Ángel Villafranca, había sido reelegido presidente del Grupo de Diálogo Civil de Vino de la Comisión Europea. Villafranca ha ocupado la presidencia de este grupo desde el año pasado y la vicepresidencia desde 2016.

El Grupo de Diálogo Civil está formado por las organizaciones representativas del sector productor, comercializador, comercio e industria, además de ONGs medioambientalistas, representantes de los consumidores, etc. Es el foro oficial que analiza con la Comisión Europea todos los aspectos relevantes para los sectores agrarios.

En el caso del sector del vino, las prioridades del Grupo de Diálogo Civil para el mandato que comienza serán el análisis de la situación de mercado en la UE y en el resto del mundo, así como la evolución del posicionamiento del sector europeo en el mercado global.

Además, se trabajará en mantener la especificad del vino en la reforma de la PAC, y se trasladará a la Comisión Europea la posición del sector del vino sobre la política comercial de la UE y la negociación de los acuerdos comerciales, donde el vino europeo busca posicionarse en nuevos mercados emergentes.

Leer más

Publicidad

  

  

Newsletter

Suscríbete a nuestra Newsletter

Ejemplar gratuito


Entra en el Kiosco para accecer a tus suscripciones, descargar revistas en abierto, comprar ejemplares, ...

Publicaciones recomendadas

Jornadas Fruticultura