Los bioestimulantes son sustancias o microorganismos que mejoran los procesos naturales para potenciar el crecimiento y la salud de las plantas, ayudándolas a una mejor absorción de nutrientes, mejorando su tolerancia al estrés y estimulando su desarrollo. A diferencia de los fertilizantes, que aportan nutrientes directamente, los bioestimulantes generalmente no incluyen nutrientes, pero sí ayudan a las plantas a aprovechar mejor los recursos existentes y a tolerar o recuperarse de cualquier estrés abiótico que puedan sufrir.

ICL, compañía especializada en fertilizantes de última generación como los Fertilizantes Encapsulados (CRF) o fertilizantes naturales con Polysulphate, en su apuesta por una agricultura sostenible añade a su portfolio la gama de bioestimulantes BEOZTM, para crear una combinación perfecta que ayude al agricultor a sacar el máximo potencial productivo de sus cultivos mediante la doble solución: nutrición+bioestimulación.

ICL lanza en España BEOZTM «gracias a años de inversión en I+D+i, ofreciendo una gama de bioestimulantes especialmente diseñada para potenciar todo tipo de cultivos y que incorpora la exclusiva Tecnología de Metabolitos (MT)». Se trata de «bioestimulantes pioneros y novedosos para asegurar que los cultivos alcancen su máximo potencial: entre otros beneficios, mejoran el establecimiento del cultivo; promueven su crecimiento; aumentan la floración y el cuajado de los frutos; mejoran la tolerancia y la recuperación ante todo tipo de estrés abiótico».

BEOZTM con la revolucionaria Tecnología de Metabolitos (MT)

La principal característica de la gama de bioestimulantes BEOZTM es que ha sido desarrollada totalmente por ICL con la Tecnología de Metabolitos (MT), que «activa más del doble de genes para aumentar la tolerancia a estrés abiótico (sequía, calor o salinidad, por ejemplo)».

La compañía ha utilizado el poder de «una gran variedad de bioestimulantes consolidados y de moléculas innovadoras y exclusivas para desarrollar la gama BEOZTM, que incorpora el alga Ascophyllum nodosum, aminoácidos, polioles, ácidos fúlvicos y húmicos, metabolitos microbianos y microorganismos, como algunos de los principales componentes para promover la vitalidad y la resistencia de los cultivos, mejorando su crecimiento, combatiendo el estrés abiótico y, en última instancia, aumentando la producción y calidad de las cosechas».

La gama BEOZTM cuenta con bioestimulantes que mantienen el crecimiento de los cultivos en marcha, «mejorando la capacidad de las plantas para absorber y utilizar los nutrientes presentes en el suelo». Además, los bioestimulantes BEOZTM mejoran el flujo de savia y nutrientes en la planta, de manera equilibrada y eficiente, pudiendo así absorber los nutrientes donde y cuando realmente se necesitan, desde y hacia las raíces, hojas o, en última instancia, hacia los frutos y granos para optimizar el crecimiento y el rendimiento de las cosechas.

ICL ha indicado que en este momento la gama de bioestimulantes BEOZTM cuenta con nueve formulaciones en España, con nombres inspirados en 9 gemas y piedras preciosas: Adamite, Cuprite, Garnet, Goldstone, Ivory, Opal, Sard, Alunite y Halite. Estas ofrecen todo tipo de ventajas para diferentes condiciones agronómicas y necesidades de los productores. Esta gama «se puede aplicar a todo tipo de cultivos, ya sean frutales, viña, olivar, cultivos extensivos, hortícolas al aire libre o en invernadero, etc.» y la mejor manera de conocer sus beneficios y uso específico es visitar la web de ICL creada para esta gama exclusiva.

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