La Agrupación de Exportadores de Almendra y Avellana de España (SAB–Almendrave) ha organizado el X Encuentro de la Almendra y la Avellana, que se ha celebrado a finales de abril en el CaixaForum Valencia. El evento ha servido, un año más, para reunir a los principales representantes de la cadena de valor de la almendra y la avellana, quienes han analizado la situación actual, poniendo en valor las fortalezas del producto desde los ejes de la sostenibilidad, la agronomía, la salud o los mercados.

La jornada la ha inaugurado el secretario de Agricultura, Agua, Ganadería y Pesca de la Generalitat Valenciana, Vicente Tejedo, quien ha destacado el valor de la industria autonómica comercializadora de almendra, además de hablar de los retos en la producción de almendra, como es la lucha contra la avispilla o la falta de productos fitosanitarios en ecológico. «Entre ustedes, los comercializadores, y nosotros, la administración, tenemos la obligación de luchar por este sector, que puede ser clave para hacer frente a la despoblación», ha destacado Tejedo. En su intervención, el presidente de SAB–Almendrave, Pere Ferré, ha mostrado su preocupación respecto a los posibles aranceles para el sector de la almendra. Al respecto, ha indicado que «para nuestra industria, sería un grave problema que Europa impusiera aranceles únicamente a la importación de almendra en grano y no a la del producto procesado, lo que se traduciría en subvencionar a la industria americana procesadora de almendra».

La ponencia de apertura ha corrido a cargo de Angélica Mateo, jefa de Área de la Subdirección General de Frutas y Hortalizas y Vitivinicultura del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), quien ha resaltado que España, con 333.246 toneladas (t) de producción de almendra con cáscara, es el segundo productor mundial tras Estados Unidos (2.024.690 t), teniendo en cuenta la media mundial entre 2019 y 2023. Así, nuestro saldo comercial es positivo, ascendiendo a 158 millones de dólares. «En los últimos diez años hemos registrado un aumento del 90% en la producción y del 45% de la superficie, alcanzando las 766.071 hectáreas de cultivo, que incluyen plantaciones en secano y regadío. Además, de las 57.778 hectáreas de plantaciones jóvenes que hay en España, un 35% están en ecológico», ha subrayado.

Agronomía y sostenibilidad

El X Encuentro de la Almendra y la Avellana también ha contado con una mesa redonda, moderada por Jordi Roig, ingeniero agrónomo de Coselva, en la que se han podido conocer los últimos avances en materia de variedades de almendra desarrollados por los principales centros de referencia en investigación de este fruto seco. En ella han participado Laura Torguet, especialista en plagas y enfermedades del almendro del IRTA; Federico Dicenta, profesor de investigación responsable del Programa de Mejora del Almendro del CEBAS-CSIC, y Gloria Estopañán, técnica de investigación del Programa de Mejora del Almendro del CITA.

Por su parte, Antonio Escribano, médico endocrinólogo y catedrático en Nutrición Deportiva, ha abordado las ventajas nutricionales y sobre la salud que implica el consumo de almendras y avellanas, destacando su aportación de grasas saludables, proteínas, fibra, vitaminas (sobre todo vitamina E) y minerales. El experto también ha participado en la mesa ‘Conocemos el valor de nuestro producto a nivel medioambiental, social y nutricional’, moderada por Josep Mª Boncompte, vocal de SAB–Almendrave, que ha contado con Anna Boulova, secretaria general de FRUCOM, y Tomás Jónatas, CEO de Bolschare, quienes han abordado la sostenibilidad desde el punto de vista de la producción y de las políticas agroalimentarias.

Mesa de mercados

El evento también ha contado con su tradicional mesa redonda sobre el mercado de la almendra, con mensajes iniciales de Clarice Turner, presidente y CEO de la Almond Board de California, y de Tim Jackson, CEO de la Almond Board de Australia. Durante la misma, moderada por la vicepresidenta 2ª de SAB–Almendrave, María José Llopis, se han repasado las producciones de 2024 de los principales países productores de almendra, se ha abordado la producción de almendra ecológica en España, así como el comercio español de este fruto seco. «Tenemos una exportación que ha crecido entre 2023 y 2024, pasando de 130.818 t a 157.370 t, y una importación que ha bajado en el mismo periodo, pasando de 119.405 t a 104.343 t. Las cosechas nacionales se han dejado notar, hay más liquidez en el mercado español y la industria procesadora española usa más esa almendra nacional en sus fábricas», ha afirmado Llopis. En su turno, Gaspar Alapont, vicepresidente de SAB–Almendrave, ha comentado que «estimamos una cosecha de 122.000 toneladas para 2025. Es un 18% más que la cosecha de 2024. Para el mes de julio podremos actualizar una cifra más objetiva».

En esta mesa redonda también han participado Héctor Serrano, CEO de Calconut; Miguel Utrera, responsable general de Almendras Utrera SL y Valor López, jefe de Compras del Grupo Chocolates Valor. Serrano ha destacado la oportunidad que se abre para los productores españoles en los próximos años. Así, ha declarado que «California está en un mínimo histórico en la ‘non bearing acreage’. Dentro de un año no va a entrar en producción lo que no se ha plantado en estos últimos años en EE.UU. Por ello vemos un cambio en el centro de gravedad, España va a ir cogiendo cuota relativa en la producción mundial, puesto que California ya ha tocado su techo de producción para los próximos cinco o diez años». Y ha incidido en los datos de producción de almendra ecológica. «En los últimos años ha habido una alta conversión de cultivo al ecológico, lo que se ha traducido en el precio de almendra ecológica y convencional haya estado parejo. Ello va hacer que muchos agricultores se bajen del ‘carro’ del ecológico para adecuar la demanda con la oferta», ha subrayado.

Por último, López, ha señalado sobre la proliferación de variedades de almendra, que en España «hay más que suficientes variedades para resolver los posibles problemas existentes, ofreciendo calidades muy superiores a las foráneas. Para nosotros, la almendra española es un signo de identidad».

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